lunes, 2 de marzo de 2009

UN "SEÑOR" CON MAYUSCULAS

UN “SEÑOR“ CON MAYUSCULAS : Por sugerencia de un joven alumno
que propone hacer la biografía de
nuestro profesor –a lo que este
asiente-.


Inopinadamente tiempo atrás, un par de meses quizás, me apersone a Eugenio y lo indague acerca de una espontánea y súbita idea peregrina que me asaltó, y que quise asirla, en el aire, para que no se me escapara.

Uds. Se van a reír –o no- pero yo lo asemejaba –y fue lo que seguidamente le pregunte- ¿vos recordas un personaje de las películas norteamericanas de acción “country” remedando a vestimenta de “llanero”, que tiene barbita, a tu usanza y lo veo, que físicamente, se te parece?. Los datos que ofrecía, eran escuetos, insuficientes, lo se y la cosa quedó allí.

Más luego, la cassette de la memoria rebobina, y da el resultado perseguido. Se trataba del personaje – en films de aventuras- que encarnaba el actor William C. Cody nada menos que el legendario “BUFFALO BILL”.

Mis reflexiones medulares buscaban entroncar, creativamente, las supuestas similitudes entre Eugenio Jose Lopez y Buffalo Bill –auténtico personaje épico- enraizado en sus epopeyas –que no fueron pocas- contra el enemigo elegido: Los Indios Sioux.
.
Entretanto las hazañas de nuestro héroe, digamos más cercano, casi familiar y domestico – En Adelante “DON EUGENIO”, son claro, en territorio literario en Colegiales, Roberto Arlt o Lola Mora donde trata de “culturar otros indios” :los discípulos, inquietos, al punto que cuando él llega, sin haber instalado aún sus” bártulos” en el escritorio, algún comedido, siempre bien intencionado lo atosiga con sugerencias y preguntas, a las que él, con invariable paciencia, seguramente aquilatada del patriarca Job argumenta: “ caramba, recién entré, aguarden a que me acomode”.

¡Hum! este año , una de cal pero… otra de arena, en el plantel del alumnado hay, por suerte, sangre nueva, esa que evitará que fenezca el empeño por “jugar, a la exquisitez, de escribir letras” brindándonos una perspectiva diversa en la impronta de cada consigna. Se trata de dos muchachitos – con la edad de nuestros nietos- y, a mi que me fascina la integración generacional, que es una calle de doble mano, donde todos nos enriquecemos- y le he escuchado apuntar, a don Eugenio, que lucen la inteligencia de un moderno adulto.


Así celebra a Alejandro que nos acostumbro, entre otras, con sus visiones dialécticas donde “ ese funyi canyengue luce ladeado sobre el rostro, inconfundible de Carlitos o áquel disparo de una bala que justo se detendrá, sin dañar, despertando al protagonista –de un sueño- un instante antes del impacto”.

O las de Christian y sus elucubraciones de altura –además creo que mide – como
como 1.85-e incursiona alrededor de la Mitología, sus dioses característicos o el amor de una rutilante sirena y el pescador desolado u otras historia tan ciertas como aún inéditas que pergenía su lucidez, envolviéndonos en sus redes de inventiva atrapante y divertida.

Ya ven, Don Eugenio, (Buffalo Bill, llanero en México o Venezuela o donde no se encuentren ondulaciones ni alteraciones geográficas escabrosas) tiene sus compensaciones. Hay otros exponentes valiosos, Leonora y Gustavo, igualmente de nueva generación, y para el “elenco estable”. A veces suenan encomios sostenidos; otras veces ¡no!, cuando nos espeta:
“hay que trabajar más el texto y los tiempos del verbo”; ¡Hágalo en su casa! o
“esta muy bien… si muy bien redactado y todo….pero es muy largo. La gente no tiene el texto delante, se pierde, se aburre y no entiene”.

Buffalo Bill, quizás guarde otras similitudes, numerales, con Don Eugenio, aquel nació en 1846, (como W. Cody) en Iowa –Denver- Colorado y el nuestro –no claro no es del mismo año- el profe debe ser de por allá…100 años después.

No es todo, se preocupa por ofrecernos apuntes ilustrativos sobre distintos géneros literarios, sus características diferenciales y ejemplos aclaratorios e informativos.

Dispone de un abanico de “consignas” movilizantes que nos obligan a utilizar una chispa interior impensada, que entonces aflora.

Se preocupa constantemente por incentivar nuestra proyección de la ejercitación literaria para lo cual nos invita a participar en concursos de este “metier” en los que él interacciona.

Colaboró con obstinación en la preparación de un compilado de nuestros trabajos, que hace pocos meses fructificó con su presentación, conmoviéndonos.

Nos provee , entre otras inquietudes, que como se advierte no son pocas, la lectura de textos de cuentos, prosa o poesía de autores consagrados.

Hay perfiles muy humanos que hablan de su personalidad, mejor que las palabras. Cierta vez con aire paternal le he oído recomendar a un alumno varón, que cuando escribimos sobre una compañera – que no exhibe al cometario público sus cuitas- aún sea en tono humorístico- tengamos recato de las palabras empleadas recapacitando si se las diríamos a nuestra esposa, hermana o hija. El ser humano es altamente sensible. . Esto vale, viceversa, para “cualquier sexo”.
También lo he visto con el ceño fruncido cuando los compañeros leen sus trabajos, en los que ponemos lo mejor de si, que obtienen exclamaciones “¡este si que está bien!, ya que desalientan a los otros. Es, en todo caso, más discreto, el aplausómetro, expresado sin palabras, y que quede allí. Lo entiendo todo, como parte de la “condición humana”. Pero…..que bueno es tener tacto, si es que no queremos molestar al otro.

Para finalizar desearía citar “los cafés literarios”, implementados asimismo de su mano y que constituyen otra puerta abierta a nuestra ejercitación como incipientes escritores, que valoramos como otro aporte de su sapiencia.

Y, dejo aquí para no disgustarlo con la extensión, creo humildemente que obtiene resultados. No es jactancioso. Se los merece. Son auténticamente de él..




REFERENCIAS:
BUFFALO BILL: Hist. E.E.U.U. s, XIX, Scout Country-Iowa,1846, Denver, Colorado, 1917. Famoso empresario del circo estadounidense. Su verdadero nombre era Wuilliam F. Cody. Sus luchas contra los indios Sioux sirvieron de base para muchos relatos de aventuras. Más tarde adquirió gran renombre con el espectáculo en que presentaba las costumbres de la vida del oeste.( rodeos, música country….).


LLANERO. Habitante de las llanuras.

ACLARACION: ESTE TRABAJO ES MEZCLA DE UN POCO DE FICCIÓN Y MUCHA REALIDAD. Las palabras están conjugadas en función de un más acabado logro en el ejercicio literario que conduce a poder expresarse tal cual lo siente, quien escribe , en el momento que lo hace, intentando un mensaje.- JFA


Investigación jack.-

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