martes, 3 de marzo de 2009

RECUPETREMOS LA IDENTIDADRECUPEREMOS LA IDENTIDAD

RECUPEREMOS LA IDENTIDAD


A VECES ME SIENTO SOLO, COMO UN HUÉRFANO
LEJOS DE SU CASA Y ANHELO PODER EXPRESAR:
UNA VEZ ME PERDI, PERO YA ME REENCONTRE.


Un prurito me molesta al gritarme que
mi opinión , inocua, en nada interfiere ni
cataliza, no obstante me atrevo a pensar,
por fin, que debemos abandonar aquellos
caminos escarpados, cuyo follaje, nos impide
ver el bosque, en la copa de cuyos árboles,
hacechándonos, los vampiros agazapados,
de turno, nos succionan
¡Por favor recuperemos los escrúpulos!, hay
un cúmulo de ellos, en lo más recóndito de
nuestras reservas morales.


Desde el principio diviso que cuando, cíclicamente, se detiene nuestro intelecto colectivo y con él , propiamente, el discernimiento, más nos hundimos en el desconocimiento más profundo de una verdad que es menester recuperar.

Mediatícamente, a cada paso, vemos banalidades como: la risa de Susana, los chismes con premios de Indomables, el crimen de Maria Marta, el nivel infrahumano de Moria, la gracia burlona de TVR y la frivolidad de los almuerzos de la Chiqui.

Se reitera, desde hace 15 días, el tema de los inundados santafecinos devenidos en victimas de la naturaleza y cierta impresión en la “falta de humor” para revertir sus efectos y daños a nivel gubernamental , todo en medio de una conmovedora solidaridad popular.lo que no es óbice para que los muertos –porque hay muchísimos desaparecidos- si son los temidos, hagan un equivalente con las perdidas humanas de Malvinas, configurando un doble desastre para una joven nación.

Y, por fin, las elecciones. Convengamos que el pueblo, el 27-04 ppdo., dio un ejemplo cívico, puso su rostro y votó. Lamentablemente, hasta ahora, cada nuevo gobernante constitucional elegido resulta, invariablemente, inferior al saliente lo que resulta una bofetada para el electorado en su conjunto. ¿Es que no sabemos elegir?. O es que ¿ somos victimas de nuestra comodidad y nos dejamos desorientar?.

A principios del siglo XX Argentina era poco menos que “El Dorado”, se contaba entre los primeros 7 países del orbe, en tanto ahora somos conceptuados a partir del orden septuagésimo.

Es tremendo, los que disfrutamos, periódicamente, el país casi en la plenitud de sus bondades, aquellas que tuvo y perdió, nos iremos con la amargura de no dejar a nuestra propia sangre la herencia recibida de nuestros mayores , y lo que es peor palpar como defraudamos a los “padres fundadores” de nuestra nacionalidad , y a la estirpe de nuestros próceres.

¿Cómo detener esta caía en vuelo a ciegas y sin paracaídas?. Desde luego que la responsabilidad es de todos, y particularmente, como corresponde de los más capaces, de los que más saben, pero con el altruismo necesario, condición “sine qua non” , para realizarlo o por lo menos intentarlo, lealmente, para todos los argentinos equitativamente.

Me voy a permitir evocar al mejor, al más honesto Pte. Argentino –según reconocimiento de propios y adversarios- Don Arturo Humberto Illia (RIP), y hago votos porque si el próximo 18-05 Nestor Kirchner , resulta ungido por el voto popular, se vista su sayo; es lo mejor, por lo menos algo que nos pueda ilusionar a manera de novedosa utopía, casi inopinada. Recordemos como se lo salpico de epítetos – el mas suave : tortuga – mientras el caía por defender la recuperación de nuestro “oro negro” y enfrentaba, por el asunto “patentes” a los Laboratorios medicinales foráneos. Así fue desestabilizado más la ignominia de arrojarlo de la Casa Rosada con los bomberos. Me da vergüenza ajena.

A contramano de la línea conductora que en el discurso pretende empujarnos a la filosofía, la lógica, la psicología , la hereje realidad nos enrostra, con crudeza, que la impronta deficitaria transcurre por el andarivel socio-económico.

Son tiempos donde se habla de “reactivación”, esa que casi nadie disfruta y muy, muy pocos palpan. Solo se benefician los que actuan en rubros de la carne y/o cereales, que reditúan divisas – dólares – como productores o los extranjeros, cuyos capitales, monitorean esas actividades.

Pero aún así, el daño sería menor si el Estado –gracioso espectador complaciente- cobrara impuestos, aranceles, etc. Y los aplicara –sin renunciar a ello- como debe ser, porque no tiene otros ingresos a: educación, salud, seguridad, ayuda social, por lo menos detendríamos “el suicidio colectivo” a que nos somete la actualidad, trasladándola, con la expectativa, de que entretanto, algo cambie, pero no para que todo siga igual, sino para hallar el resquicio por el cual emerger de esta atonía que nos asfixia.

Jamás nos conformara un nuevo gobierno que suponga una llamarada luminosa que calmara engañosamente ansiedades y angustias solo por seis meses y luego se extinguiera lentamente en esa sensación ratificando un desasosiego, del que ya estamos sarturados, de nunca acabar.

Somos, en fin, parte de un mundo que nos ignora como nación, que nos ha excluido practicamente, nos daña y nos interesa, no podemos decir que no, entonces ¿ porque no buscar los senderos para abortar los motivos con dignidad?. Pugnariamos por volver a la auto estima que otorga no mendigar favores ni prestamos leoninos que lejos de liberarnos, nos postran, esclavizandonos, mientras lo que queremos es valernos por nosotros mismos.¡Sera justicia!..

Hay urgentes incognitas develadas, sin reasolver, nada menos, entre otras : deuda externa, salarios, tarifas, y por sobre todo ello implementarlo con dignidad. ¿Menuda faena verdad?. Pero.........por lo pronto recordemos a Ortega y Gasset cuando nos espetó: “Argentinos a las cosas”. Es decir “ si no lo hacemos nosostros para nosotros mismos ¿quién lo hará?, Y, si no lo hacemos ahora, ¿cuándo?”.

A estas alturas de los episodios es bueno que “el gran pueblo argentino” memorice que quienes nos dominan – con auxilio de los cipayos de siempre- poseen una envidiable y supina visión geo-política, que nos anticiparon, en 1806/1807 con las Invasiones Inglesas.Que estos mismos actores se apoderaron aviesamente de Malvinas en 1833, una curiosidad de adelantada optica.

Con anterioridad de varias décadas ya piratas holandeses, franceses e ingleses, especialmente, que pululaban en el Rio de la Plata, hacia 1850 tramaban derrocar a Rosas
que les oponia la pretensión del usufructuo de monitorear el ingreso de mercancias así pirateadas.

Más aún, tras su caida exigieron nos dieramos la Constitución en 1853, y la Organización Nacional y el Codigo Civil en 1860, este último lo propugnaban para garantizarse, juridicamente, sus inversiones, habida cuenta que disponian de capitales para dirigirlos hacia el Rio de la Plata.

Frente a estos antiguos cancerberos economico-sociales, devenidos hoy modernamente en el F M I , nuestro gobierno debería, por fin, velar por el interes inexcusable de sus gobernados y mandantes , y no proteger a aquellos historicos expoliadores filibusteros que, mientras se acorazan, nos reducen a timidos Boy Scauts.

Necesitamos pleyades nuevas que surjan, como el ave fenix del campo juvenil, aquel diezmado por la dictadura 1976/1983 que es, sin duda, el deficit intelectual que devino en tanta penosa mediocridad. ¿Cómo hacerlo?, si a los sobrevivientes de tal barbarie, los obligamos oportunamente a no pensar, olvidar la política, tomar cerveza – a la manera yanqui- y hacer una vida inclinada, licenciosa, mechada de la droga en la bailanta. Todo para preservarlos con el amor de la lógica, paterna, atormentada de persecuciones que provocando esos barros nos transportaron a estos lodos. ¡Que patetico dilema! ¿Verdad?

Ciudad Autonoma de Buenos Aires
Mayo 11, 2003.-

Jacques Farji Abulafia

No hay comentarios:

Publicar un comentario