BASTA DE LÁGRIMAS SOBRE EL DESIERTO

BASTA DE LAGRIMAS SOBRE EL DESIERTO

De los dichos del director de la Biblioteca Nacional, el politologo Eduardo Gruner (Clarín 26-09-1999) recupero que “puestos en meros lectores, nos consta, que desde Sarmiento o Alberdi para acá la Argentina ha cultivado una riquisima tradición ensayistica. Sin precipitarnos en la analogía con el dulce de leche no obstante diremos que cierto tipo de ensayo – polémico, politizado, implacable, mordiente – es casi un invento argentino.

Propone a Borges en cierto sentido, como el más “nacional” de nuestros ensayistas: descubrió que la “lengua” rioplatense es el producto de una resistencia siempre fallida y recomenzada contra otras lenguas, las europeas”.

Por mi parte desearía agregar en coincidencia, que toda literatura política puede no ser partidista y si encarnar una interpretación de la "“Polis" en todo tema pero descarto la capacidad necesaria para abrogarme astutamente esa intención que seria descabellada. Yo digo nada mas...

Es que en “democracia”, bienvenida sean cualesquiera de las situaciones que la proyectaron, se posibilito descartar los conflictos que se reemplazan por el “consenso” donde la sociedad se pregunta por su destino y no se conforma por el simple gesto de informase graciosamente ante las cámaras de tv.

Por ello lo que les voy a referir no es pirotecnia verbal , antes bien, es recoger vivencias y trasladarías como una intervención en la historia – perdón por la petulancia – para despejar nuestras ilusiones de esperanzados herederos.

Tambien quiero con el auxilio de Oscar Sbarra Mitre decirles.
“Sin dudas, Dios es el primer ensayista. Seguramente será Tambien el ultimo. Aunque nunca bautizo su Creación con semejante denominación literaria, bien se sabe toda vida es un ensayo, y que así mismo merecen tal calificación tanto el prologo – al que no asistimos – como el epilogo – al que no asistiremos - del mundo”.

Pero se infiere que podemos imaginarnos a ambos, y a cualquier otro tópico donde el marco que elijamos sea permisivo, para volcar nuestras reflexiones en el terreno del ensayo.

Así es que les elevo una circunstancia fortuita la que me privilegio entre el 9 y 24 de Septiembre ppo.

Tuve oportunidad de visitar México, algo impensado durante años esta vez favorecido por una cantidad de factores que lo facilitaron a traves de una erogación mínima.

Percibí como este mundo globalizado nos envuelve a todos sin importar la latitud en que nos encontremos. En México hay simultáneamente con nuestro país elecciones presidenciales y ¡oh sorpresa! Los argumentos esgrimidos por los políticos allí eran idénticos a los de acá: corrupción, venalidad y todas las yerbas que escuchamos contra nuestra voluntad a cada instante.

Desde luego que frente a la urna cualquier emisor va a valorar si las condiciones que lo enmarcan le son favorables en su desenvolvimiento naturalmente su voto será oficialista. Si por el contrario su porvenir estuviera incurso en una cierta nebulosa buscando el cambio que necesita su elección será por la oposición esa verdad que refleja una realidad cierta es lo que define los cambios de rumbo en la inteligencia de una vida mejor.

El paisaje del lugar – Cancun – Una maravilla de la naturaleza. El mar caribeño posibilitaba visualizar colores desde el azul violacio que en degradee llegaba a un suave celeste en una temperatura entre los 28/33 G°C en invierno y una arquitectura piramidal, formidablemente bella, en medio de una vegetación verde constante que lo adornaba todo. Todo esto ayudado vaya a saber por cuantos millones de dólares y calidades diferentes.

Entonces una cara un mundo desbordante de magnificencias y por el otro una población obligada a trabajar por salarios ínfimos (40 pesos mexicanos = igual 4 dólares diarios).

Así es como uno casi llega a reprocharse arribar, conocer y disfrutar un lugar al que difícilmente las mayorías puedan acceder. A cualquier ser sensible le repercutirá comprobar tantas escalas sociales diferentes y ver los motivos por los que la inmensa mayoría no los conocerá jamas.

Entonces en un mundo tan revuelto donde cada vez a la clase media se nos van cerrando posibilidades enmarcados todos en tantas injusticias sociales, de todo orden, en el orbe entero me retrotrae a las epopeyas en los inicios del 1800 cuando se fraguaron las libertades de la mayoría de los pueblos americanos.

Hoy en las puertas del 2000 se impone, globalizacion mediante, otra vez una gesta “liberadora” de la opresión económica de los insensibles centros del poder mundial a que nos someten los grandes bonetes que mandan discriminando en el mundo quienes si y quienes no, ¿ Cómo se llego a esto? ¿Tienen mandato divino como en la antigüedad los reyes?

Pero entonces es cuando aquí se impone la pregunta del millón: ¿ Quién, Quienes o que Nación encarnara el liderazgo de los reclamos de las grandes masas de población que viven desposeídas?.

Comprendo que se trata de una nueva utopía, ¿ Pero es que acaso se puede vivir sin la esperanza de alentar futuro?.

¿ No es cierto que a la manera de un bote sin remos nos exponen temáticas plenas de interrogantes sin darnos soluciones? Y añaden “hay que hacer algo” sin puntualizarnos ¿qué?

Los pueblos oprimidos no tienen otro desahogo que llorar sus penas. Si lo hicieran sobre el mar, al menos, su caudal se incrementaría levemente, pero no caen sobre el mar sino en la aridez de las arenas hirvientes, donde se absorben sin pena ni gloria, por lo que como un clamor las comunidades erizadas gritan como un desafio. Basta de lágrimas en el desierto.

Octubre 1999