ESE SABOR DE VIVIR
(H O M E N A J E)
Lozanos, en la primavera existencial,
transitamos la “cuesta arriba”…
desconociendo, que para el otoño-
invierno hay otra : la “cuesta abajo”,
cuando la abordamos, lo hacemos
con dudas, con temores , como se
caen las hojas de los árboles, que
parece que tienen prisa por irse,
perdido ese sabor de vivir porque
cruzaremos “esa difusa cortina luminosa”.
A VECES pienso que escribir, con sal, es tender redes, plausible forma de pescar, con un selecto anzuelo abarcativo, en este ámbito experimental del aula, que amparó mi emoción, hasta quebrar mi voz, por los sentimientos que se van enhebrando, y la magia de las palabras, que desbrozan, paulatinamente, la expresión de textos substantivos.
UN HOMBRE, muy grande, con contenido superlativo fue mi maestro, mi amigo y mi guia: Mi Padre, que a más de 20 años de su partida, con su halo y su carisma, perfuman de calidez mi alma.
TRES MUJERES, entretanto, en torbellino, absorbieron mi vida, con su obstinación, su temple e inteligencia: Mi Madre –ya en el cielo-, mi Esposa – mi cenit- y, mi hija –Un sol-.
FRIO, no me permití sufrir, mi vida ha sido agitadamente caldeada por los tantos avatares, que preñaron de vallas, mi sendero, donde una fuerza “providencial” me hizo sortearlas cada vez.
SUEÑO y anhelo me acotaron, enmarcándome, por doquier, y mis interminables fantasías, los complementaron, para darle “nervio” a mi accionar sin claudicaciones.
“MIEDO tendré, y bueno no seré “, reza un sabio refrán español arcaico –ladino- , fue como un alerta, desde la cuna, que me orientaba, asistiéndome, para no equivocar el camino.
PARA SIEMPRE FELIZ, es una forma de sentirme bien, fortaleciendo mi auto estima, que nunca fue poca, rodeado de mi compañera, mis hijos y mis nietos; y tantos amigos, claro.
PUDO SER mejor o peor, no lo se, si se que “rico es quien se conforma con lo que tiene”, entonces me siento millonario en afectos.
SE FUERON , A VECES, los años en pos de mis ciclos con: UN Hombre singular. TRES Mujeres ¡tan especiales!, cuando hizo FRIO o calor, en medio de SUEÑOS y miedos, dejándome, aún así, una estela indeleble que dice” ¡PARA SIEMPRE FELIZ! “ , y no me digo :PUDO SER; sino ¡fué!. Y, si pudiera volver a empezar, deseo que amerita poseer intacto el sabor de vivir, lo repetiría todo, perfeccionándome.-.
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