¡FELICIDADES!

¡FELICIDADES!
Escuchando una cortina musical
producir un texto sobre:
“AQUELLA MELODIA Y VOS”


Aquel domingo resultaría inolvidable. Caía la tarde y los novios volvían, de una excursión a Lujan, en tren., acomodados en el “último asiento”, entre las dos luces para intentar una mayor pseudo privacidad, tomados de la mano o soltándose para abrazarse y besarse, apasionadamente, sin solución de continuidad.

El sol, primaveral y acariciante, se les había inoculado en la piel transvasándose a sus almas, incorporándoles el incentivo que se alimentaba de sus mutuas promesas; no había otro para ella, ni ninguna, fuera de ella para él.

Que dulce placidez, parecían que hablaban con sus miradas, viviéndolas, en pos de sus más caros deseos, reflejos de sus pupilas puras y profundas , donde los jóvenes saben bañar y deleitarse con ilusiones formulando castillos , que crea el corazón, en su imperiosa necesidad , de la naturaleza humana, de amar, cuando estalla, y se torna irrefrenable.

En un momento se dejaron estar físicamente, como sublimándose en un desmayo emocional mientras sus mentes volaban, a velocidades sub-sónicas, por paralelos insondables del alma, de pronto, como si volvieran a sus cabales se estrecharon fuertemente, entonces unas lágrimas de felicidad brotaron de sus ensueños y rodaron por su encendida mejilla, él la miraba absorto, creía estar ante una revelación virginal.

¡Que momentos!, allí nadie imagina y menos admite si es un “sueño de juventud” o un rapto de” amores de estudiante”, antes bien eran actores de una página del poeta más tierno, cuanto atrevido, en medio de la musicalidad de dos almas , echas una a la medida de la otra, de la que se destacaban nítidamente ella y aquella melodía….. ……………….¡Felicidades!.-

JFA